domingo, 5 de julio de 2009

Influenza H1N1 (gripe “A”)




Declaran una pandemia

El 11 de junio del 2009, la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó el nivel de alerta mundial de pandemia a la Fase 6 en respuesta a la continua propagación global del virus de la nueva influenza tipo A (H1N1). La designación de la Fase 6 indica que se está presentando una pandemia global.

Más de 70 países están reportando ahora casos de infección humana con la nueva influenza H1N1. Este número ha ido en aumento en las últimas semanas, pero muchos de los casos reportados estaban relacionados con viajes o eran brotes localizados sin propagación en la comunidad. La designación de la OMS de la Fase 6 refleja el hecho de que en la actualidad se están presentando brotes continuos a nivel de la comunidad en múltiples lugares del mundo.

La decisión de la OMS de elevar el nivel de alerta pandémica a la Fase 6 es un reflejo de la propagación del virus, no de la gravedad de la enfermedad causada por el virus. En este momento no es muy claro qué tan grave o serio será este nuevo virus pandémico H1N1 en términos de cuántas personas infectadas tendrán complicaciones graves o morirán debido a la infección con este virus. La experiencia con este virus es limitada hasta el momento y la influenza es impredecible. No obstante, debido a que el H1N1 es un virus nuevo, muchas personas no tendrán inmunidad o esta será mínima, por lo que la enfermedad puede ser más grave y propagarse en forma más generalizada. Además, en la actualidad no hay una vacuna que proteja contra el virus nuevo H1N1.

En los Estados Unidos, la mayoría de las personas que se han enfermado con este recién declarado virus pandémico se han recuperado sin necesitar tratamiento médico. Sin embargo, los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, EEUU) anticipan que en los próximos días y semanas habrá más casos, más hospitalizaciones y más muertes asociadas con esta pandemia. Además, este virus podría causar un número considerable de enfermedades asociadas con hospitalizaciones y muertes en el otoño y el invierno durante la temporada de influenza en los Estados Unidos.

Antecedentes

La nueva influenza A (H1N1) es un nuevo virus de la influenza de origen porcino que causó enfermedades por primera vez en México y los Estados Unidos en marzo y abril del 2009. Se cree que la nueva influenza A (H1N1) se transmite de la misma forma que la influenza estacional común, principalmente a través de la tos y los estornudos de las personas que están enfermas con el virus, pero también puede contagiarse al tocar objetos infectados y luego tocarse la boca y la nariz. Se ha reportado que la infección por el virus nuevo H1N1 causa una amplia variedad de síntomas similares a los de la influenza como fiebre, tos, dolor de garganta, dolores en el cuerpo, dolor de cabeza, escalofríos y fatiga. Además, muchas personas también han reportado náuseas, vómito o diarrea.

El primer caso de un paciente infectado por el virus nuevo H1N1 en los Estados Unidos fue confirmado por pruebas de laboratorio en los CDC el 15 de abril del 2009. El segundo paciente se confirmó el 17 de abril del 2009. Rápidamente se determinó que el virus se estaba propagando de persona a persona. El 22 de abril, los CDC activaron su Centro de Operaciones de Emergencia para coordinar una mejor respuesta de la salud pública. El 26 de abril del 2009, el gobierno de los Estados Unidos declaró una emergencia de salud pública y ha estado implementando en forma intensa y activa el plan nacional de respuesta a una pandemia.

Desde que se detectó por primera vez el brote, un número creciente de estados en los Estados Unidos ha reportado casos de la nueva influenza H1N1 asociados a hospitalizaciones y muertes. Para el 3 de junio del 2009, todos los 50 estados de los Estados Unidos, el Distrito de Columbia y Puerto Rico habían reportado casos de infección por la nueva influenza H1N1. Aunque los sistemas estadounidenses de vigilancia epidemiológica de la influenza indican que en este momento la actividad de la influenza en general está disminuyendo en EE. UU., en ciertas partes del país siguen ocurriendo brotes de nueva influenza H1N1 y en algunos casos se presentan con una actividad intensa.


Los CDC siguen monitoreando cuidadosamente la situación para apoyar la respuesta de salud pública y recoger información sobre este virus y sus características. En el Hemisferio Sur apenas está comenzando la temporada de la influenza y la experiencia que se adquiera ahí podrá proporcionar pistas valiosas de lo que podría ocurrir este otoño e invierno en el Hemisferio Norte
.


0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio